Polonia, años 60. Kalina Jedrusik, ícono del cine y la música polaca, un escandaloso símbolo sexual de espíritu libre, lucha por su independencia en la mojigata sociedad polaca de los época. La actriz y cantante es más popular que nunca, pero un funcionario al que ha dado calabazas amenaza con arruinar su carrera.
Dos policías son delegados para resolver el asesinato de un médico, un especialista en trasplantes de médula ósea y jefe de una empresa que opera en el campo de los trasplantes. Poco a poco, descubren una maraña de corrupción, un lucrativo comercio de órganos humanos e intentos de vender información confidencial sobre el ADN.